Los cambios que se sucedieron a nivel mundial en el contexto laboral, estuvieron intrincadamente relacionados con el derrumbamiento del modelo de regulación fordista-keynesiano como régimen determinado para la acumulación capitalista, que sustentaron los Estados sociales. La crisis de dicho modelo de regulación, resultó determinante para que los Estados capitalistas de los países desarrollados incorporen un nuevo marco político-económico derivado de las corrientes del pensamiento neoliberal, que pudieron consolidarse a nivel mundial mediante la introducción de la globalización de mercado y a partir de las nuevas características que asume la intervención del Estado, lo cual, resultó funcional a las estrategias de flexibilización en las condiciones de contratación y uso de la fuerza de trabajo implementadas por el capital, para emprender una reestructuración del sistema de acumulación que indujo a una radical trasformación del contexto productivo y laboral de orden mundial durante las dos últimas décadas del siglo pasado, y que estuvo deliberadamente orientada en desmedro de la clase trabajadora.
El desarrollo del presente escrito tiene por objeto exponer el impacto que tuvo sobre el mundo del trabajo el desmoronamiento de los Estados sociales desatado a mediados de los años setenta, y los efectos que esto produjo en los trabajadores durante las dos últimas décadas del siglo pasado, a la vez que se propone reconocer y describir cuáles fueron las circunstancias que originaron la configuración de un nuevo escenario laboral, tanto para el contexto de los países desarrollados y los de América Latina, como, particularmente en Argentina.
El desarrollo del presente escrito tiene por objeto exponer el impacto que tuvo sobre el mundo del trabajo el desmoronamiento de los Estados sociales desatado a mediados de los años setenta, y los efectos que esto produjo en los trabajadores durante las dos últimas décadas del siglo pasado, a la vez que se propone reconocer y describir cuáles fueron las circunstancias que originaron la configuración de un nuevo escenario laboral, tanto para el contexto de los países desarrollados y los de América Latina, como, particularmente en Argentina.