Universitat Oberta de Catalunya. 2002. 44 p.
La sociedad actual ya no se entiende sin la existencia de los computadores: cuando sacamos dinero del cajero automático, cuando reservamos un billete de avión o de tren, cuando seleccionamos un programa de la lavadora, cuando hablamos por teléfono, cuando nos hacen un escáner o un análisis de sangre, estamos utilizando computadores. Si pensamos que los primeros computadores se fabricaron en los años cuarenta, nos damos cuenta de que en cincuenta años hemos pasado de una situación en la que estos ¿animales¿ eran desconocidos a otra en la que el funcionamiento de la sociedad es imposible sin ellos.
La sociedad actual ya no se entiende sin la existencia de los computadores: cuando sacamos dinero del cajero automático, cuando reservamos un billete de avión o de tren, cuando seleccionamos un programa de la lavadora, cuando hablamos por teléfono, cuando nos hacen un escáner o un análisis de sangre, estamos utilizando computadores. Si pensamos que los primeros computadores se fabricaron en los años cuarenta, nos damos cuenta de que en cincuenta años hemos pasado de una situación en la que estos ¿animales¿ eran desconocidos a otra en la que el funcionamiento de la sociedad es imposible sin ellos.