Una de las voces más poderosas de la narrativa brasileña actual.
“La escritura de Marçal Aquino alcanza tal nivel de excelencia dentro de la literatura policial que sus libros dejan de ser literatura de género para convertirse en la literatura a secas.” José Geraldo Couto, crítico, periodista y traductor
Tras el éxito de la versión en español de Yo recibiría las peores noticias de tus lindos labios (publicada por Océano), regresa Marçal Aquino con otro ejemplo de su enorme talento narrativo. Su nueva novela se sitúa en São Paulo y cuenta la historia de tres ingenieros, quienes son socios en una empresa de construcción. La vida del trío da un giro dramático cuando aceptan participar en un fraude. De inmediato surgen conflictos entre ellos, los cuales se tornan mortales. Dos de ellos deciden eliminar al tercero, sin darse cuenta de que están poniendo en movimiento los engranajes de una pesadilla de culpa y violencia. Un dato curioso es que esta novela dio lugar a una película que se filmó antes de que el autor hubiera terminado de escribir el libro.
“La escritura de Marçal Aquino alcanza tal nivel de excelencia dentro de la literatura policial que sus libros dejan de ser literatura de género para convertirse en la literatura a secas.” José Geraldo Couto, crítico, periodista y traductor
Tras el éxito de la versión en español de Yo recibiría las peores noticias de tus lindos labios (publicada por Océano), regresa Marçal Aquino con otro ejemplo de su enorme talento narrativo. Su nueva novela se sitúa en São Paulo y cuenta la historia de tres ingenieros, quienes son socios en una empresa de construcción. La vida del trío da un giro dramático cuando aceptan participar en un fraude. De inmediato surgen conflictos entre ellos, los cuales se tornan mortales. Dos de ellos deciden eliminar al tercero, sin darse cuenta de que están poniendo en movimiento los engranajes de una pesadilla de culpa y violencia. Un dato curioso es que esta novela dio lugar a una película que se filmó antes de que el autor hubiera terminado de escribir el libro.
