El presente material está escrito para motivar a las personas a confiar en el Dios de los imposibles. Las estrategias de Dios para alcanzar el éxito rompen con el patrón aplicado por los hombres. Para un administrador que posea el mínimo de raciocinio, es sensato pensar que se debe recortar gastos en una empresa que esté a punto de bancarrota. Para Dios, una empresa que está en bancarrota es la candidata perfecta para comenzar a invertir, porque cuando las estrategias del hombre se agotan, allí Dios interviene y endereza lo que está torcido para que su nombre sea exaltado.
Gerenciar bajo los principios divinos abre una puerta al hombre que nunca antes había conocido, para que aprenda que con Dios todo es diferente, pero seguro y te lleva al éxito.
Gerenciar bajo los principios divinos abre una puerta al hombre que nunca antes había conocido, para que aprenda que con Dios todo es diferente, pero seguro y te lleva al éxito.