Por un lamentable error, la guerrilla argentina secuestra a un gris
cónsul honorario, sin ningún interés para el gobierno británico. La
pretensión de negociar queda rápidamente frustrada, y el cónsul, Charles
Fortnum, queda en manos de un grupo encabezado por un ex sacerdote con
el que le unieron vínculos de amistad.
Situada en la provincia de Corrientes en los años setenta, el autor se
inspiró en el secuestro auténtico del cónsul paraguayo Waldemar Sánchez
ocurrido en marzo de 1970 mientras Greene estaba de visita en la
Argentina.